Las previsiones no fallaban. Mundaka amanecía con una marejada perfecta, vientos favorables y la marea en su punto justo para regalar una de esas sesiones que quedan grabadas en la memoria. Con las líneas entrando limpias, la izquierda más icónica del Cantábrico volvía a demostrar por qué es una de las mejores olas del mundo.
Desde el primer momento el line up se llenó de caras conocidas y surfistas que no querían perderse esta jornada. Aritza Saratxaga destacaba con su fluidez y precisión en cada maniobra, aprovechando al máximo las secciones huecas que ofrecía la ola. También se pudieron ver a otros riders locales dominando las condiciones con gran técnica, disfrutando de tubos perfectos y paredes abiertas que permitían giros potentes.
Como fotógrafo acuático de surf en Mundaka, esta sesión fue un desafío y una experiencia única. La corriente, intensa como siempre, exigía estar en constante movimiento, buscando el mejor ángulo sin perder la posición. Entre las series más grandes, el reto era mantenerse firme en medio de la potencia del mar mientras capturaba el momentito en que los surfistas desaparecían dentro del tubo.
Aquí podrás ver algunas de las imágenes de esta jornada, donde la luz, el agua y la acción se unieron para crear instantáneas que son la esencia de Mundaka. Para leer la crónica completa de mi primera sesión como fotógrafo acuático en esta ola legendaria, haz clic aquí.







